El punto de inflamabilidad o de ignición es la temperatura crítica a la que se inflama una mezcla de gas inflamable y aire. Se alcanza cuando la mezcla alcanza una llama y se mantiene ardiendo durante al menos cinco segundos. 
Normalmente, esta temperatura se alcanza con una chispa eléctrica. Esta chispa inicial suministra la energía para encender la mezcla, y es similar a encender un quemador de gas en casa.
Cuando la temperatura sube lo suficiente, comienza la combustión y se produce de forma permanente. A esta temperatura, la superficie de la sustancia libera cantidades suficientes de vapores inflamables para encender una llama o una cerilla. 
Finalmente, la mezcla de combustible y aire arderá por completo, dando lugar a un incendio. Pero hay una distinción entre el punto de inflamación y el punto de encendido.
				
			- 16 de septiembre de 2022
 - Seguridad
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